LENTOS COMO TORTUGAS, PERO SEGUROS
Hoy desperté con la visión de todos los animales marinos que mueren a manos de nuestros residuos plásticos. Quería hacer algo, ir allí y limpiar con mis manos la brea que cubre sus alas y aletas, arrojada por mí y mis hermanos humanos. La verdad es que vengo sintiendo su dolor cada vez que tiro algo plástico a la papelera. Me pregunto dónde irá y si puedo cesar este consumo desaforado, al menos en mí.
¿Cuál ha de ser nuestra reacción a fotografías como la que acompaña este texto? La indignación no ha de exacerbar nuestros ánimos contra los demás, sino corregir nuestras posturas y acciones. No hay nada fuera que no esté dentro. La ignorancia y la inconsciencia propia hacen llegar al mar, a la tierra y al aire nuestros residuos. Mi nuevo decálogo es éste:
1. No arrojar a la basura nada que un estómago humano no pueda digerir. Estamos hechos de los 4 elementos, y si tu estómago no puede, qué te hace pensar que el agua o la tierra puedan. Son nuestras hermanas, no vertederos!
2. Pensemos dos veces antes de comprar cualquier cosa, ¿necesitamos o consumimos?
3. Evitemos los envoltorios no retornables, infinitas bolsas de plástico, bolígrafos, latas y hasta arandelitas de botellas de agua. En caso de no poder evitar comprar, reciclemos!
4. Cuidado con electrodomésticos, móviles, televisores, cámaras, portátiles... Realmente necesitamos un modelo nuevo?
5. El verbo reparar va antes que el verbo sustituir por otro nuevo (puede aplicarse a relaciones!)
6. Prefiera el vidrio y el papel al plástico.
7. Prefiera la comida orgánica y natural a la enlatada y procesada (su médico se lo recomienda hace lustros, y su salud lo agradecerá)
8. El WC no es una basura, evite arrojar sólidos, incluso papel, tenga al lado siempre una papelera. (En Brasil todos hacen esto!)
9. Venda o regale los objetos que no usa, compre en tiendas de segunda mano, alquile sus pertenencias (trajes, máquinas...), done a quien lo necesita, por un mundo más justo. No hace falta hacerse misionero, hay pobres a la vuelta de la esquina.
10. Ayude a quien se lo pida y recuerde que las peores dificultades y problemas, ni son eternas ni resisten a una sonrisa!
5 comentarios
Alvaro -
Gracias por este maravilloso blog
Juan Carlos -
Elena Silvestre -
Intentaremos aplicarnos a las 6 primeras, por el momento, aunque sobre la 5 tengo mis dudas. Y sobre la última... a sonreir más a menudo!
Ra -
Raúl Herrero
Alfonso -